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Cuando buscas productos de ahorro o inversión, tu objetivo es hacer crecer tu capital. Pero ¿cómo encontrar los productos con más rentabilidad? Para responder a esta pregunta debes conocer el retorno de la inversión o ROI.
El retorno de la inversión mide la ganancia que se obtiene con una inversión.
La fórmula para calcularlo es: (Rendimiento obtenido – Inversión) / Inversión x 100.
El ROI puede variar de un momento a otro, y siempre debes valorarlo antes de invertir o contratar un producto de ahorro.
Compara rentabilidades de depósitos a plazo fijo y cuentas de ahorro de bancos europeos con tipos más competitivos.
ROI son las iniciales de return on investment. O lo que es lo mismo, retorno de la inversión. Es un indicador que permite medir el resultado económico de una inversión. Esto es, ver el beneficio obtenido durante un periodo de tiempo determinado. Se trata de una información de vital importancia a la hora de contratar productos de ahorro o invertir en activos financieros.
Por consiguiente, si quieres rentabilizar tus ahorros, no olvides que lo primero que debes hacer es comprobar el retorno de la inversión de los diferentes productos que estás barajando. De no hacerlo, podrías no obtener ningún beneficio o incluso perder el dinero invertido. Por este motivo, es muy importante calcular el ROI antes de invertir.
Para calcular el retorno de la inversión necesitas sumar todos los gastos o comisiones que has tenido. La fórmula del ROI la utilizan tanto las empresas para calcular su beneficio como los inversores que buscan una rentabilidad. Es la siguiente:
ROI = (Rendimiento obtenido – Inversión) / Inversión x 100A modo de ejemplo, imagina que haces una inversión de 1.000 € y consigues un rendimiento de 1.100 €. En este caso, la fórmula sería: (1.100 - 1.000) / 1.000 = 0,1. Es decir, por cada euro invertido, obtienes 10 céntimos. Después, multiplica por 100 y tendrás la rentabilidad total en porcentaje (0,1 x 100 = 10). La rentabilidad de la inversión será del 10 %. Si la inversión se ha hecho durante dos años, la inversión anual será un 5 %.
El ROI de un producto de ahorro puede variar de un año a otro, por tanto, no es siempre el mismo. Para que lo entiendas mejor, si quieres obtener una rentabilidad con un depósito a 12 meses, puede que en este momento la TAE que ofrezca sea del 4 %, pero quizá en 6 meses ese mismo depósito ofrezca un 3,8 % TAE.
Por lo general, el dinero pierde valor con el tiempo debido a la inflación. Por ello, es aconsejable contratar un producto de ahorro o invertir en acciones de una empresa o en otros instrumentos para no perder valor adquisitivo. A continuación puedes ver el ROI que podrías obtener con algunos productos de ahorro e inversión, pero recuerda que el retorno de la inversión indicado, como ya hemos mencionado, no es fijo y puede variar.
Deuda pública: el Gobierno emite diferentes instrumentos para financiarse, como los Bonos del Estado. Durante los últimos años, el tipo de interés ha alcanzado más de un 3 %, pero también ha habido momentos en que ha sido negativo.
Cuentas de ahorro y cuentas remuneradas: son dos productos de ahorro de bajo riesgo muy populares. El ROI dependerá del tipo de interés que ofrezca la entidad bancaria. Revisa siempre la TAE, ya que muestra el beneficio que obtendrás teniendo en cuentas las comisiones (si las hay).
Invertir en bolsa: el ROI suele estar entre un 3 y un 9 %, dependiendo principalmente del área geográfica. Así, por cada euro invertido, el retorno de la inversión es de entre tres y nueve céntimos.
Invertir en criptomonedas: las monedas digitales son activos muy volátiles. Consecuentemente, si tienes alta aversión al riesgo, quizá esta no sea la mejor inversión para ti. En cualquier caso, el ROI variará según la criptomoneda elegida y su evolución.
El ROI de los depósitos bancarios varía. Por un lado, no es lo mismo un depósito a la vista que un depósito estructurado. Lo mismo ocurre con los depósitos a plazo, ya que normalmente a mayor plazo de vencimiento, más alta es la TAE. Por ende, el ROI de un depósito a 24 meses y de un depósito a 36 meses no suele ser el mismo.
Además, el país en el que contratas el depósito también influye. Por ejemplo, un banco europeo puede necesitar captar depósitos por diferentes motivos (si está en un momento de expansión, etc.), y por eso ofrece depósitos con tipos de interés más altos que los de los bancos españoles.
Como ves, el retorno de la inversión de un depósito bancario varía según diferentes factores, por lo que es recomendable comparar rentabilidades y condiciones. Si contratas uno con un 3 % TAE con un importe de 100.000 euros a 12 meses, al cabo de ese año tendrás un ROI de 3.000 euros. La ganancia sería mucho menor si fuese un 1 % TAE.En definitiva, el ROI es un concepto muy importante en el mundo de las finanzas y las inversiones porque te permite determinar cuánto vas a ganar con tus inversiones y productos de ahorro para así planificarte de cara al futuro.