Los inversores siempre se preguntan qué hacer con sus ahorros. ¿Invertir o no invertir? He ahí la cuestión. Y en caso de hacerlo, ¿se pueden hacer inversiones sin riesgo? ¿Se puede invertir dinero de forma segura? Si eres de los que prefiere evitar el riesgo al invertir, en este artículo puedes ver cómo invertir minimizando el riesgo.
Si te preguntas dónde invertir dinero sin riesgo, lo primero que debes saber es que toda inversión tiene un riesgo.
No se puede invertir sin riesgo, pero sí puedes minimizarlo si diversificas, inviertes regularmente y moderas los activos.
En vez de preguntarte dónde invertir sin riesgo, busca activos que se adapten a tu perfil de inversor.
Si tienes alta aversión al riesgo, puedes optar por productos de ahorro como depósitos a plazo fijo y cuentas de ahorro que te den una rentabilidad fija.
No se puede invertir dinero sin riesgo, en todas las inversiones se asume, como mínimo, el riesgo de inflación. De hecho, si no hay riesgo no se podría hablar de inversión. Lo que sí puedes hacer es reducir el riesgo en tus inversiones:
Riesgo: puedes minimizar el riesgo al máximo para no perder ni un céntimo, o asumir un poco de riesgo. Si eliges la segunda opción, podrás tener alguna pequeña pérdida.
Invertir a corto o largo plazo: ¿cuándo te gustaría utilizar el dinero que has ahorrado? Si vas a necesitar tu dinero dentro de tres años, entonces el mercado de valores no es el mejor sitio para invertir.
Diversificación: pon tus huevos en muchas cestas diferentes, así, si caes en alguna de tus inversiones, no lo perderás todo. Cuanto más distribuyas tu dinero entre las distintas clases de activos financieros y las regiones geográficas, menor será el riesgo por una caída en el mercado de valores.
Revisa de manera periódica tu cartera de inversión: reequilibra tu cartera para no sobreexponerte a una sola inversión. Si inviertes en fondos de inversión, el gestor realizará ese reequilibrio.
Como ves, no existe la inversión ideal, sobre todo si se busca una rentabilidad más elevada, pero sí las inversiones en las que puedes gestionar el riesgo de una forma óptima para que esté bajo control.
Ahora que ya sabes que las inversiones sin riesgo no existen, te damos algunas claves para minimizarlo:
No hay formas seguras de invertir dinero, pero para disminuir el riesgo tienes que poner tu dinero en varios tipos de inversión. Al diversificar y crear una cartera con varios activos, reduces el riesgo de perder todo tu dinero, ya que, para que esto suceda, varias de las inversiones que has realizado tendrían que dar malos resultados al mismo tiempo.
La diversificación no solo se refiere a los tipos de activo, también es una buena idea diversificar invirtiendo en diferentes regiones geográficas o en diferentes divisas.
Haz múltiples inversiones a lo largo del tiempo en lugar de hacer solo una. Es decir, invierte regularmente. La ventaja de este enfoque es que, en lugar de adquirir valores o acciones de una empresa a un precio único, que podría ser favorable o desfavorable, obtienes el precio medio, puesto que has hecho varias inversiones en diferentes fechas.
Cuando los tipos de interés sean bajos puedes obtener rendimientos incorporando un número moderado de activos que puedan generar beneficios, como los activos de renta variable. Si eres un inversor conservador, diversifica tu cartera con un 85 % de activos de riesgo bajo o muy bajo y un 15 % de activos de renta variable. El primer tipo ofrecerá un rendimiento modesto, pero tendrá bajo riesgo, el segundo tipo es más volátil, pero solo se mantiene en un porcentaje bajo y de manera diversificada.
Estas inversiones aumentarán el rendimiento promedio de la cartera y, de esta manera, el rendimiento general de tu inversión será positivo y tendrás el riesgo bajo control.
¿Te preguntas dónde invertir dinero de forma segura? Si estás buscando una manera de minimizar los riesgos, lo mejor es que optes por cuentas remuneradas, bonos, depósitos o Letras del Tesoro.
Aunque son un producto de ahorro y no una inversión, las cuentas de ahorro te darán un rendimiento por el dinero que tengas ahorrado. Tienen un indicador de riesgo de 1 sobre 6, y hasta 100.000 € por depositante y banco están protegidos por el Fondo de Garantía de Depósitos nacional. El único riesgo que asumes al contratar una cuenta de ahorros es la inflación, ya que puede no compensar la depreciación de la divisa.
En Raisin puedes acceder a cuentas de ahorro de entidades europeas con hasta un 3,16 % TAE. Además, se pueden abrir de forma online y el proceso de apertura es en español.
Los depósitos a plazo fijo son también un producto de ahorro cubierto por el Fondo de Garantía de Depósitos nacional. A través de un depósito, el banco promete pagar un tipo de interés establecido durante un plazo específico si dejas la cuenta intacta hasta que finalice el plazo que se ha firmado por contrato.
El principal riesgo de los depósitos a plazo fijo es que si retiras los fondos antes de tiempo, puede que tengas que pagar una penalización, aunque no todos los bancos la aplican. Suele ser una comisión o la devolución parcial o total de los intereses generados. Es importante que leas con detenimiento el contrato para saber bien las condiciones del producto financiero que quieres contratar. Son una buena opción para obtener un rendimiento de tu capital, sobre todo en periodos de inflación.
Las empresas también emiten bonos, que son calificados como de alta, media o baja calidad. El valor de mercado de un bono puede fluctuar según los tipos de interés. Además, la empresa también podría incumplir los pagos de intereses y capital.
Sin embargo, para mitigar el riesgo del tipo de interés, los inversores pueden seleccionar bonos que vencen en los próximos años. Los bonos a más largo plazo son más sensibles a los cambios en los tipos de interés.
Los bonos tienen un riesgo menor que las acciones u otros instrumentos, aunque, como ya hemos mencionado, ningún activo está libre de riesgos.
Las Letras del Tesoro son valores de renta fija pública que emite el Gobierno mediante subasta para financiarse a corto plazo. Actualmente, el Tesoro Público emite Letras a tres, seis, nueve y doce meses y lo hace al descuento, es decir, el precio de adquisición puede ser inferior o superior al importe que recibirá el inversor. La diferencia entre el valor de reembolso y el precio de adquisición será la rentabilidad.
Al ser un producto de inversión que emite el Gobierno, el riesgo es mínimo porque la probabilidad de impago es muy baja.
Si eres un inversor conservador, en periodos de alta inflación debes asumir riesgos si quieres que tus ahorros crezcan. En cualquier caso, si inviertes en alguno de estos productos financieros y tienes en cuenta las claves analizadas, tendrás el riesgo bajo control.