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¿Te preguntas qué son las retenciones en la nómina y cómo calcularlas? Si la respuesta es afirmativa, sigue leyendo porque en esta guía hemos recabado toda la información que necesitas saber al respecto. Toma nota, y no te pierdas nada sobre la retención del IRPF en tu salario.
Son los importes que se deducen de las nóminas en concepto de IRPF o seguridad social. Así pues, también es la diferencia entre el salario bruto y el salario neto de un empleado.
Hay dos tipos, retención del IRPF y retención de la Seguridad Social. Para la primera hay establecidos varios tramos del IRPF, mientras que para la segunda existen grupos y bases de cotización.
Para calcular la retención del IRPF se tienen en cuenta varios aspectos: tipo de contrato, grado de discapacidad, tramos del IRPF, situación personal y familiar, devengos salariales y lugar de residencia.
La Seguridad Social establece unos tipos impositivos para contingencias comunes y profesionales que se aplican en la nómina según el grupo y la base de cotización del asalariado.
Las retenciones en la nómina son cantidades de dinero que se descuentan del salario bruto de un trabajador en concepto de IRPF y seguridad social. Por tanto, es la diferencia entre el salario bruto y el salario neto, siendo este último la cantidad que recibe el asalariado en su cuenta bancaria cada mes.
La empresa aplica las retenciones en la nómina de cada empleado. De esta forma, además de pagar las contribuciones a la Seguridad Social (por ejemplo, por desempleo o jubilación), el empleado adelanta el pago del IRPF del ejercicio fiscal. Después, al hacer la declaración de la Renta con el modelo 100, dependiendo de lo que tenga que pagar de IRPF y de lo que ya haya adelantado, el resultado puede salir a pagar o a devolver. En otras palabras, con la retención del IRPF, el trabajador está adelantando a Hacienda el tributo por sus rentas de trabajo.
Por otra parte, según el artículo 99 de la Ley 35/2006, de 28 de noviembre, del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y de modificación parcial de las leyes de los Impuestos sobre Sociedades, sobre la Renta de no Residentes y sobre el Patrimonio, los pagos a cuenta del IRPF pueden ser con retenciones, ingresos a cuenta o pagos fraccionados, y las personas jurídicas que abonen rentas sujetas al impuesto están obligadas a aplicar retención e ingreso a cuenta en concepto de pago a cuenta del IRPF del perceptor.
Por tanto, las empresas están obligadas a hacer retención del IRPF en los salarios de sus empleados.
Hay dos retenciones en la nómina que se descontaran de tu salario bruto: la retención del IRPF y la retención de la Seguridad Social.
A la hora de pagar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, existen varios tramos del IRPF que se aplican sobre los salarios. Esto significa que no se paga un mismo tipo impositivo por todos los ingresos obtenidos, sino que existen diferentes tipos y mientras más se gana, más se paga en concepto de IRPF.
Además, las retenciones en la nómina tienen en cuenta el salario anual para que el resultado de la declaración de la Renta sea lo más ajustado posible a la cantidad total que tienes que pagar por este impuesto. Por eso, el salario neto que te llega a tu cuenta bancaria suele ser siempre el mismo, a menos que decidas ajustar la retención del IRPF con tu empleador.
En 2024, estos son los tramos del IRPF:
Hasta 12.450 € un 19 %.
De 20.200 € a 35.200 € un 30 %.
De 35.200 € a 60.000 € un 37 %.
De 60.000 € a 300.000 € un 45 %.
Más de 300.000 € un 47 %.
Sin embargo, las retenciones en la nómina pueden ser inferiores a ese primer tipo impositivo del IRPF. En concreto, del 2 % si se trata de contratos temporales con una duración inferior a 12 meses, contratos de prácticas o de becarios, y actividades agrícolas, ganaderas o forestales.
Por otro lado, el Gobierno español aprobó en febrero de 2024 una rebaja de las retenciones en el IRPF para las personas que cobren el Salario Mínimo Interprofesional (15.876 € anuales). Así, los trabajadores con el SMI no tendrán retenciones de IRPF en su nómina. Además, según el Real Decreto 142/2024, de 6 de febrero, también se disminuye la retención a las personas con rendimientos de trabajo netos de hasta 19.747,5 € anuales.
Además de la retención del IRPF, en la nómina también hay una retención en concepto de seguridad social. Esto es, el dinero que pagas todos los meses de cotización por desempleo, accidentes laborales, enfermedad, baja por el nacimiento de un hijo, etc.
Todas estas cotizaciones se dividen en dos grupos:
Contingencias profesionales: desempleo, formación profesional, enfermedad o accidente laboral, etc.
Contingencias comunes: enfermedades o accidentes no laborales, maternidad o paternidad, etc.
Asimismo, existen diferentes grupos de cotización que clasifican a los trabajadores según sus funciones, y sirven para determinar las bases de cotización mínima y máxima. Por ejemplo, grupo 1, ingenieros y licenciados (siempre y cuando se realicen las funciones de ingenieros y licenciados).
En definitiva, los grupos de cotización determinan las bases de cotización de los asalariados, o lo que es lo mismo, la cantidad mínima y máxima que pagarán a la Seguridad Social.
Para calcular las retenciones en la nómina se tienen en cuenta varios aspectos.
Grado de discapacidad del empleado: si tienes una discapacidad, la retención dependerá del grado.
Situación personal y familiar: cuando empiezas un trabajo nuevo debes informar a tu empleador de tu situación personal y familiar a través del modelo 145, que tendrás que volver a rellenar si tu situación cambia (si tienes un hijo, te casas, etc.). Este modelo es muy importante porque tu situación afecta a las retenciones en la nómina. Por ejemplo, si tienes descendientes o un ascendiente discapacitado mayor de 65 años a tu cargo, pagarás menos de IRPF y, consecuentemente, la retención será menor.
Devengos salariales: es lo que tu empresa te ofrece a cambio de tu trabajo. Aquí no solo entra el salario, sino también los complementos salariales y el salario en especie (como las tarjetas de comida, un vehículo, etc.). Y es que, no olvides que la retención del IRPF varía según los rendimientos de trabajo obtenidos. Si quieres pagar menos impuestos, hay rendimientos de trabajo en especie que están exentos de tributar.
Lugar de residencia: puede haber deducciones de nómina según el lugar de residencia. Por ejemplo, en Ceuta y Melilla hay deducciones vigentes.
Tipo de contrato: ¿tienes un contrato temporal de varios meses o un contrato indefinido?
Si quieres calcular la retención del IRPF en tu nómina, también puedes utilizar la calculadora que pone la Agencia Tributaria a disposición de los contribuyentes.
En lo que respecta a la retención de la Seguridad Social, necesitarás saber tu base y grupo de cotización para calcularla. En cualquier caso, estos son los porcentajes:
Un 4,70 % de la base de cotización por contingencias comunes.
Un 1,55 % (contratos indefinidos) y un 1,60 % (contratos temporales) por desempleo (contingencias profesionales).
Un 0,10 % por formación profesional (contingencias profesionales).
Un 4,7 % en concepto de horas extraordinarias.
Como puedes ver, para saber tus retenciones en la nómina deberás conocer varios aspectos. Si quieres aprender más sobre la tributación española, echa un vistazo a nuestro artículo impuestos en España.